Tiene un alto valor nutritivo: en proteínas, carbohidratos, fibra y calorías.
Se utiliza como ingrediente para algunos antibióticos y según los especialistas reducen los niveles de la testosterona, por lo que suele recomendarse para prevenir y curar afecciones a la próstata. Se le atribuye propiedades curativas para el hígado, riñones y estimulante sexual.
Es recomendable para personas con problemas hepáticos y renales. También se utiliza contra los cálculos renales. En el antiguo Perú lo usaban contra la anemia y las infecciones urinarias.